Algo de romance para Feng Kai Cang Lang- Parte 42

Parte 42

Ran Ran vio como la luz del sol salía desde su cama. No había podido dormir ni un solo segundo. Tomo una poción para recuperar su vida y no sentirse somnolienta. Esa había sido una noche larga

Sin duda alguna era una de las noches más largas de su vida

No había parado de imaginarse a Bai Li y a Yin juntos.

Vale, sabía que no harían nada. Más que nada por las miradas que Yin le dedicaba a Ran. Pero eso no le quitaba parte de su sentimiento de preocupación

“Es un asco” pensó mientras se lavaba la cara y sentía como en el agua se iban sus lagrimas. La sociedad de la que ella venia era extremadamente monógama, las parejas polígamas estaban muy mal vistas.

Dolía tener que asumir que ella nunca descansaría al lado de Bai Li como su esposa. Solamente por no ser la primera esposa

Mierda. No debía llorar. Ese día se encontraría con Bai Li y no debía tener los ojos rojos

-Lo mejor para eso es una toalla humedecida

-¡Wan! ¿Cómo te has colado? Se supone que la casa permanecería cerrada una semana-Ran Ran fue a quitarse el paño que le había puesto sobre los ojos y ella se lo impidió

-Tranquila, he entrado con Su Majestad. Ahora cállate y déjame trabajar

El rey entro en el dormitorio y se encontró a su hermano sentado en la silla donde lo había dejado y a Yin sentada en la cama tal y como la había dejado la noche anterior. Ninguno se había movido

-¿En serio? ¿Os habéis pasado la noche quietos?

-Su Majestad-Yin se inclino de manera respetuosa

El rey hizo un gesto con su mano

-Eso no es necesario. Ahora eres la esposa de mi adorable hermanito

-Creo que ya soy un poco mayor para llamarme adorable-Bai Li parecía tenso

-Nunca dejaras de ser adorable ante mis ojos-el rey sonrió mirándole-Y ahora ha llegado el momento de prepararos

Dio un par de palmadas y varias criadas entraron a la habitación

-¡Esperen! ¿Qué ocurre, hermano?

-Nada, solo algo que planeo mi dulce Emperatriz con la adorable hermana de tu segunda esposa

Bai Li sintió que un trozo de hielo se deslizaba por su cuerpo

Wan tenía un plan, eso casi nunca significaba nada bueno

Bai Li se sentía incomodo en esa ropa. Normalmente usaba una engorrosa ropa amplia compuesta por muchas capas. Pero esta ropa era simple y aerodinámica, parecía diseñada para adaptarse al cuerpo y no para esconderlo.

Además, habían recogido su cabello en una sencilla coleta

-Realmente cualquier cosa que lleves te sienta bien-su hermano lo estaba mirando con una cara extraña

-Cuando Wan me pasó los diseños no creí que se viese tan bien. Es tan diferente de la ropa que normalmente usamos…

¿Wan había diseñado esa ropa? Era ajustada, pero el tejido era levemente elástico por lo que no resultaba desagradable

La reina le llevo hasta un patio donde había preparado un arco con hermosas flores blancas y todo estaba decorado con telas blancas y doradas

Incluso había asientos decorados. Yin estaba en uno de ellos junto a Ran y su hermano se sentó en uno de los delanteros junto con la reina, su padre, el líder de la secta y el anciano Mu

Han también estaba allí. Sentado en un banco con Yu entre sus brazos

-¿Tu sabes qué pasa?

-No, pero Wan dijo que si cuando ella llegase no estabas sobre la cruz roja te caparía-Han intento sonreir-Tambien me dijo que abriese los ojos y observase

Una puerta se abrió y Bai Li corrió a colocarse sobre la cruz y se giro en dirección a la puerta

Se quedo sin habla o respiración

Ran Ran estaba allí. Llevando un vestido de luto blanco, sin embargo era un vestido increíblemente hermoso y que le sentaba de maravilla

Un diseño claro y sencillo, el tejido tenía un leve tinte dorado. Dos tirantes dejaban el cuello y los hombros casi al descubierto, con un escote suave. Una tira de oro y gemas preciosas rodeaba su cintura y daba inicio a una falda algo abombada como una flor.

Ella llevaba su rostro y su cabello cubierto por un velo de una tela blanca casi transparente y su pelo solamente recogido en parte y colgando detrás de ella.

El collar que el día anterior estuvo sobre su cabeza hoy estaba sobre su cuello, junto con unos pendientes y un par de brazaletes a juego

Wan salió desde detrás de ella con un vestido de color azul claro

Entonces Bai Li se dio cuenta de que Ran Ran también se veía confusa. Sonrojada, hermosa y confusa

-Lo siento, pero ha llegado el momento de explicarles-Wan alzo la voz para que Bai Li que estaba un poco más lejos pudiera oírle- El caso es que es costumbre que la familia del novio haga un regalo a la novia. Lady Yin pidió como regalo una copia unos manuscritos secretos de la biblioteca real a los que solo tres eruditos y el rey tienen acceso

Esos no eran tomos que contenían secretos de estado, solo eran libros que se habían prohibido durante un reinado por su contenido inmoral. Pero se habían guardado copias

-Sin embargo para tu regalo me pidieron que les ayudase a preparar una boda de nuestro mundo de origen

Ran Ran Abrió la boca emocionada y luego hizo un gesto de agradecimiento a la pareja gobernante

-Yo oficiare la ceremonia-Wan se coloco al lado de Bai Li, al otro lado del arco de flores-Así que, adelante hermanita, ve con el novio

La sonrisa de Ran Ran al reunirse con Bai Li era hermosa. La sonrisa de él también lo era. Parecía que ante sus ojos solo brillaba la persona que tenían delante el uno del otro.

-Bueno, ahora viene la parte en la que yo debería hablar de vuestro vínculo. De el amor mutuo que os procesáis el uno por el otro y demás. Pero viendo como os miráis es imposible no saber qué os adoráis el uno al otro. Aunque tuve que hacer alguna que otra trampa para que acabaseis juntos, por que se notaba a quilómetros de distancia que os gustabais

Soltaron una risita nerviosa

-La primera vez que os visteis yo os presente, y supe al instante que a mi dulce hermana le había gustado este joven. Y al cabo de un tiempo me di cuenta de que a él también le había gustado ella de manera sincera. Aunque no se atrevía a dar el primer paso-el hermano y padre de Bai Li se rieron- Así que tuve que volver a meter mano para manipularos un poquito, porque no avanzabais ni a tiros. Pero viendo el resultado, me siento feliz de haberos ayudado a alcanzarlo.

“Ahora se supone que los novios deben realizarse unas promesas mientras deslizan un anillo en el dedo anular del otro. Como no lo habéis preparado ni ensañado como es costumbre seremos buenos e indulgentes. Ran Ran, puedes empezar”

Les tendió los anillos

Esos anillos eran un ítem del juego. “El anillo del matrimonio” Solo podía ser usados por parejas y te alertaban de cuando el otro estaba siendo atacado, su vida peligraba o subía de nivel.

Su apariencia se basaba en la energía interna de los portadores de la pareja. Cuanto mejor era la relación más fuerte era el anillo y además proporcionaría una mejora en la defensa.

-Yo, Tao Sang Ran te juro a ti Lei Bai Li, amarte, protegerte y respetarte hasta el último latido de mi corazón. Prometo avisarte cuando mi hermana planee algo. Prometo escucharte, incluso cuando empieces a divagar, y no discutir contigo, sobre todo cuando tengas la razón. Prometo estar a tu lado en cualquier circunstancia, tanto si el sol brilla y el viento sopla a nuestro favor como si estamos en medio de una tempestad y a punto de morir. No me separare de ti

Wan se seco unas cuantas lágrimas. Ran Ran había crecido tan bien. Y no era la única. El padre de Bai Li parecía una fuente en esos momentos. Nunca espero que el hombre de rostro serio fuese tan sentimental

Ran Ran cogió el anillo de la mano de Wan y lo deslizo en el dedo anular de Bai Li. Este la cogió de la mano y se la llevo a los labios

-Yo, Lei Bai Li te juro a ti Tao Sang Ran, que te amare, protegeré, venerare y adorare hasta el fin de mis días. Intentare protegerte de los planes de tu hermana, aunque no sé cómo hacerlo. Prometo estar a tu lado cada día de tu vida, ser la espada que te defienda, los brazos que te den refugio y un compañero fiel. Te doy mi corazón para que hagas con él lo que desees.

Bai Li deslizo el anillo en el dedo de Ran Ran y entonces Wan se inclino hacia su oído y le susurro algo.

Bai Li asintió y levanto el velo con sus dos manos antes de posar sus labios sobre los de Ran Ran

El beso fue largo y tierno. Dulce.

No había nada indecente excepto su duración

Cuando se separaron Wan alzo su mano y chasqueo los dedos

Lin Shi Xiong y Sandia empezaron a volar. Dejando caer de sus cestas pétalos rojos como la sangre

-Bueno, nosotros os dejamos. Ya sabes cómo sigue Ran Ran. Aprovéchalo

-Me ha gustado-el padre de Bai Li se cubrió con la capa de los sirvientes para salir sin hacer ruido o llamar la atención

-Las bodas de este mundo son preciosas, pero en el mundo en que me crie también eran muy bonitas

-No, vuestras bodas están centradas en la pareja  y en lo que ellos desean. Las nuestras están pensadas en lo que dirán los demás

Wan se atrevió a preguntar lo que le rondaba la cabeza desde que lo había oído

-¿Qué libros pidió lady Yin?

-oh, unos tomos que fueron censurados hace ochenta años por que contenían ilustraciones de dos hombres o dos mujeres besándose

Normal que Yin tuviese interés en esos textos.

-Solo espero que mi hijo logre ser feliz con sus dos esposas

-Eso espero yo también

-Veo que has madurado de la manera adecuada-el hombre sonrió de manera extraña-¿No considerarías la idea de ser mi esposa?

Wan soltó una risita

-Lo lamento, ya tengo un prometido

-¿Y no puedes hacer una excepción?

Wan se dio cuenta de que los ojos de han no estaban sonriendo y de que su espada estaba muy cerca de ser desenvainada

-Señor, creo que mi prometido, que está detrás de usted, no opina de igual manera

Ran Ran se encontraba entre los brazos de Bai Li mientras bailaban, como ella le había enseñado.

-¿Qué ocurre?

-Nada, estas muy guapo. Esa ropa te queda muy bien

-Gracias, pero voy a tener un rato complicado quitándomela

-Yo te ayudare

-Eso espero, mi dulce esposa

Ran Ran aparto la mirada

-Sang Ran, te juro que anoche no toque a Yin-Ran Ran aparto la mirada de él

-Lo sé, pero duele saber que el día de mi boda mi marido no estuvo conmigo esa noche. En el lugar de donde vengo eso es considerado una falla de la mujer-Era cierto, a pesar de todo el feminismo si la pareja no pasaba la noche junta, sin un motivo justificado, se solía echar la culpa a la pobre mujer que en el fondo no había hecho nada

-Pues no pienses que ayer fue el día de nuestra boda. Tu y yo nos hemos casado el día de hoy y ya esta

Mierda, ¿Por qué estaba tan romántico y dulce?

(Explicación: Wan, sabiendo que Bai Li la cagaria si le dejaban solo, puso un pequeño filtro amoroso en la ropa de Bai Li que ha sido absorbido poco a poco por sus poros. De esa manera le está haciendo ser sincero y sacar sus verdaderos sentimientos a la luz)

-Yo soy tuyo, por completo, tú eres la dueña de mi alma y mi corazón. Y si quieres puedo gritarlo a los cuatro vientos

-¡No!

-O tú podrías marcarme para que todos supieran que soy tuyo

Wan le dio un suave beso a Yu después de lograr que comiese. Le dejo sobre una alfombra y este elevo la cabeza.

Era tan lindo

-Solo para que lo sepas, Han, pero quiero tener al menos otros cinco hijos

Han se puso pálido y abrió y cerró la boca varias veces. Era tan lindo

-Puede que ya tengamos a uno en camino

-Oh, no… Tomo píldoras para prevenir la concepción

Han puso un gesto extraño con su cara

-¿Y entonces porque…?

-No me voy a casar embarazada Pero espero tu total entrega y dedicación a la tarea después de la boda y antes de marcharte

-Entre mi maestra y tú me vais a matar

-¡No te preocupes, continuaras con vida en la memoria de nuestros hijos! Y hablando de tu maestra, ¿no tienes que ir a entrenar?

-Me ha dado dos días libres más. Voy a vaguear un poco y a estar contigo todo lo que pueda

Wan le abrazo y dejo que él la mimase un poco mientras Yu se reía desde la alfombra

-¿Quieres unirte, mi tesoro?-Le puso sobre su regazo y Han puso sus manos delante de él. Yu se mostro encantado y empezó a explorarlas con devoción

Han miro el cuadro y se dio cuenta de algo. No había tenido momentos así desde que su familia murió y entro a la secta. Esa paz, esa sensación de plenitud que te daba saber que todo estaba en el lugar correcto… Eso era algo que siempre le había faltado

Su maestra le mantuvo entre las llamas del odio y el dolor para hacerle más fuerte. Y ahora Wan le estaba haciendo más fuerte curando sus heridas y dándole una estabilidad emocional que el hielo anterior no dejaba formarse